Los extractos de plantas se han utilizado ampliamente como aplicaciones tópicas para tratamientos de curación de heridas, antienvejecimiento y enfermedades. Ejemplos de estos incluyen ginkgo biloba, equinácea, ginseng, semilla de uva, té verde, limón, lavanda, romero, thuja, zarzaparrilla, soja, higo chumbo, Artemisa, jojoba, aloe vera, alantoína, feverwort, bloodroot, apache plume y papaya. Estas plantas comparten un carácter común: todas producen compuestos flavonoides con estructuras fenólicas., Estos fitoquímicos son altamente reactivos con otros compuestos, como las especies reactivas de oxígeno y las macromoléculas biológicas, para neutralizar los radicales libres o iniciar efectos biológicos. Una breve lista de fitoquímicos fenólicos con propiedades prometedoras para beneficiar la salud humana incluye un grupo de compuestos polifenólicos, llamados catequinas, que se encuentran en el té verde. Este artículo resume los hallazgos de estudios que utilizan polifenoles de té verde como agentes quimiopreventivos, curativos naturales y antienvejecimiento para la piel humana, y discute posibles mecanismos de acción.