toxina botulínica A inyección: se puede utilizar con otras técnicas o como terapia primaria. 25 a 50 unidades de toxina botulínica A se inyectan directamente en el pterigoide lateral para prevenir la dislocación recurrente. Las inyecciones se pueden repetir cada 3 a 6 meses para mejorar los resultados y reducir la morbilidad. El mecanismo de acción bloquea la liberación de acetilcolina de la unión neuromuscular al bloquear la liberación mediada por el calcio. El resultado de bloquear la liberación de acetilcolina es un debilitamiento temporal del músculo., Se ha informado que el uso de la toxina es una opción de tratamiento razonable y segura para su uso en la población pediátrica con dislocación recurrente de la ATM.
inyección de sangre autóloga: es una técnica conservadora en la que el espacio articular recibe una inyección con toda la sangre del paciente. En esta técnica, el espacio articular se lava con líquido cristaloide y se drena. Luego se extrae sangre completa del paciente y se inyecta en el espacio articular. El volumen de sangre inyectada es aproximadamente de 2 a 4 mL en el espacio articular y de 1 a 1,5 mL en las estructuras pericapsulares., El objetivo de inyectar sangre autóloga en el espacio articular es causar una reacción inflamatoria que resulta en fibrosis y cicatrización de la articulación y el tejido capsular. Este proceso disminuirá el cumplimiento de la articulación y disminuirá el rango de movimiento. Hay informes con respecto a las preocupaciones sobre el daño al cartílago articular secundario a la reacción inflamatoria utilizando esta técnica.